Te quiero aunque no estas

Cundo era pequeña vivía con ambos padres, todo iba bien hasta que cumplí los 9 años de edad, donde mi familia tomo una decisión que le iba a dar un gran giro a mi vida, fue entonces que mis padres decidieron vivir en otro país, al principio el plan era muy bueno, mi mama, mi hermana y yo, viajaríamos primero a ese país, luego mi padre viajaría para estar con nosotras, lo que nunca sucedió.

A partir de ese momento mi relación con mi padre solo era vía telefónica, una vez a la semana, luego una semana si y otra no, luego mensual, hasta que después solo era para días de cumpleaños o cuando me enfermaba, porque mi mama le decía que me llamara.

Una etapa de mi vida la cual considero la mas difícil, fue mi adolescencia, donde comencé a cuestionar mi relación con mi papa, tenia muchas preguntas, muchas dudas y  mi corazón se lleno de odio hacia el. Muchos pensamientos llegaron a mi mente, y lo culpaba, ya que si el hubiera estado con nosotras nuestras vidas serian diferente, además que emocionalmente tenia un gran vacío, donde me sentía sola y desprotegida, y sin estar consciente busque llenar ese vacío en una relación amorosa con un joven que me llevaba cinco años, cuando yo apenas tenía 15.

Pero en medio de todo, Dios llego a mi vida en el momento preciso, y una de las áreas que me guió a trabajar fue la relación con mi padre, El me ayudo a llenar ese vacío con Su palabra, Porque aunque mi padre y mi madre me hayan abandonado, el SEÑOR me recogerá. Salmo 27:10

Entendí que, aunque mi padre terrenal me haya abandonado, Dios es mi padre eterno, que nunca me abandonara y me ama de manera incondicional, El es mi sustentador, mi proveedor y protector.

Después que Dios sano mi corazón, me hizo ver y entender otras cosas que me ayudaron a perdonar a mi papa.

Primero, si Dios me perdono a mi, siendo tan pecadora, yo no soy nadie para no perdonar a mi padre.

Segundo, Dios me hizo entender que mi papa no podía darme a mi lo que nunca había recibido. El es huérfano de ambos padres, nunca tuvo el amor de un papa o una mama, y en su niñez recibió mucho maltrato físico, psicológico y verbal. Desde pequeño se ha cuidado a si mismo enfrentado la vida solo, y como familia solo nos tiene a nosotras. Comprendí que el nunca iba  a ser un buen padre porque nunca tubo uno.

Tercero, decidí pedirle perdón por todo el rencor que le tenia, y aprendí amarlo con el amor que Dios había llenado mi corazón.

No fue fácil para mi, todo fue un proceso, pero hoy en día estoy agradecida de Dios por mi papa y porque me da la oportunidad de hablarle acerca de El, de Su gran amor.

Quizás tu relación con tu papa se parezca a la mía en mis años de adolescencia, el ha estado ausente y ha faltado a su responsabilidad de padre, proveedor y protector ¡puedo entender como te sientes! Dios nos ha creado con una inclinación hacia las relaciones, desde el principio Su intención era que todas nuestras relaciones fueran perfectas, pero a causa del pecado todas han sido afectadas, y solo El nos puede ayudar para tener relaciones sanas donde se establezca un buen vinculo de amor.

¿Esto que significa? que la irresponsabilidad de tu padre es consecuencia del pecado, y que el necesita perdón y salvación, pero si su falta ha permeado tus sentimientos, entonces mi querida hermana, debes correr a Cristo para que El te ayude a sanar tu corazón herido y que a pesar de su falta tu puedas reflejar amor por el y guiarlo a Cristo.