
En los artículos anteriores conversamos sobre las expectativas que solemos tener del chico ideal y sobre las cualidades que hacen a un joven idóneo. De vez en cuando se nos hace fácil hacer una lista de cualidades para los chicos, evaluarlos y, descalificarlos. Nosotras debemos hacernos una autoevaluación donde podamos identificar si somos portadoras de esas cualidades que un joven piadoso también anda buscando en oración. Por la gracia y el favor de Dios podemos no ser perfectas, más bien nos depositamos en sus manos y todos los días nos va dando forma, moldeando y tallando hasta alcanzar el excelente diseño que él ya pensó.
Durante mi niñez, escuchaba que las chicas debían ser mujeres virtuosas y que son la ayuda idónea del hombre, aunque no comprendía en absoluto lo que eso significaba. Pensaba que ser una mujer virtuosa o ayuda idónea eran cualidades exclusivas para las mujeres casadas. Y es posible que tú también pensaras igual que yo. Siempre que se habla de esto suele ser en actividades para las madres o mujeres con esposos. Solemos estar inmersas en la vida cotidiana, asumiendo que comprendemos y aceptamos nuestro rol. Pasa el tiempo y nos damos cuenta de que carecemos de una correcta orientación, de modelos de feminidad bajo el diseño divino, y de mujeres piadosas que nos enseñen con sus propios testimonios lo que eso significa. Pero, en las sagradas escrituras encontramos toda la dirección y guianza que necesitamos para entender, asumir y vivir en plenitud de acuerdo a nuestro rol. Te invito a leer “Aprendiendo sobre feminidad bíblica” y “Diseñadas con un propósito” que amplia sobre el tema.
Todo lo que vemos en nuestro hogar, los ejemplos de nuestras madres, las mujeres de nuestras familias y nuestras líderes influyen directa e indirectamente en las cualidades que nos definirán de adultas. Es por esto que debemos estar prestas en aprender, mediante el estudio de la palabra, sobre estos atributos que convierten a una joven en una mujer virtuosa, y también nos podemos permitir desaprender aquellos modelos que no van acorde con el diseño original. Todas las cualidades (las correctas y las que no) se fomentan desde nuestra niñez y se reflejan posteriormente (para bien o no) dentro del matrimonio.
Es por esto que desarrollar las cualidades de una mujer virtuosa desde mucho antes del matrimonio, nos evitará sentirnos incapaces, frustradas, mal humoradas e inmaduras en la convivencia de nuestro nuevo hogar.
De acuerdo a Proverbios 31:10-30 identificamos 7 cualidades que destacan a la joven virtuosa, y lo veremos desde un punto de vista que puedes empezar a implementarlas dentro de tu vida actual si no estás casadas (si ya estas casada, trata de vivificarlas aún más):
- Es temerosa del Señor. Prov. 31:30 “Engañosa es la gracia y vana la belleza, pero la mujer que teme al Señor, ésa será alabada”. Puedes reconocer que el Señor está presente en tu vida y priorizar tu relación con El más que todas las cosas.
- Da testimonio. Prov. 31:28-29 “Sus hijos se levantan y la llaman bienaventurada, también su marido, y la alaba diciendo: Muchas mujeres han obrado con nobleza, pero tú las superas a todas”. Tu familia, amigos y líderes ven en ti una joven que se deja liderar, que le gusta aprender y que es afable. Da testimonio de la obra de Dios en tu vida
- No se afana. Prov. 31:27 “Fuerza y dignidad son su vestidura, y sonríe al futuro”. Aprende esta virtud siendo diligente (esto puede evitar el estrés) y teniendo la certeza de que Dios está en control de todas las cosas.
- Ama y valora la familia. Prov. 31:21 “No tiene temor de la nieve por los de su casa, porque todos los de su casa llevan ropa escarlata”. Muestra interés por los tuyos y percátate de las necesidades de los que integran tu familia y se diligente en mostrarles tu amor.
- Es generosa. Prov. 31:20 “Extiende su mano al pobre, y alarga sus manos al necesitado.” Se desinteresada y muestra misericordia ante las carencias de los demás.
- Ejerce mayordomía. Prov. 31:16-18 “Evalúa un campo y lo compra; con sus ganancias planta una viña. Ella se ciñe de fuerza, y fortalece sus brazos. Nota que su ganancia es buena, no se apaga de noche su lámpara”. Aprende a distinguir entre el deseo y la necesidad al momento de comprar algo, maneja el dinero con prudencia y se ahorrativa.
- Es de confianza. Prov. 31:11-12 “En ella confía el corazón de su marido, y no carecerá de ganancias. Ella le trae bien y no mal todos los días de su vida.” Practica buenas relaciones de amistad basadas en el respeto, la discreción y la naturalidad.
Es posible que seas portadora de muchas de estas cualidades, pero quizás hay algunas de ellas que es necesario impulsarlas un poco más. Estemos confiadas de que estando en las manos de Señor podemos asumir nuestro rol con gozo, teniendo la certeza de que somos sus preciosas hijas, y de que sus designios para nosotras son perfectos. Y, Desde El Atelier, es nuestra oración, que en el tiempo y el propósito de Dios para ti puedas encontrar al joven que Dios te preparó y ambos podrán contentarse y glorificar el nombre del Señor en una relación basada en sus términos. Eso, querida hermana, no tiene precio.
Hoy puedo hablar de esto con propiedad pues he visto la mano de Dios obrar de manera sobrenatural en mí carácter como mujer joven. He aprendido que en su amor podremos siempre vencer todas las dificultades personales que se nos presentan, de manera específica en dejarnos transformar y aceptarnos de acuerdo a su plan para nosotras. Y sé que Él lo puede hacer contigo. ¡Amen!
En el siguiente artículo y el ultimo de esta serie hablaremos sobre “La elección ¿cómo sé que es el joven correcto?”
Dios bendiga sus vidas y gracias por tan poderosos mensajes derramados desde el cielo
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Excelente! Muy buen articulo!
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Este tema ha sido una ran bendición a mi vida, muchas gracias por publicarlo y que Dios te siga llenando de sabiduria para publicar muchos más. 😀
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